El color tiene el poder del simbolismo, y puede ser utilizado para enviar una señal rápida y sencilla al cerebro en menos tiempo que la comunicación escrita. El color también tiene un poder emocional que nos atrae, capturando y reteniendo nuestro interés con mayor eficacia que el blanco y el negro.

Maximiza el poder del color al organizar tus tareas de acuerdo a un código de color que tú identifiques. Si tienes un millón de cosas que hacer y la única pregunta es cuál de todas es la más urgente, intenta ordenar las tareas por prioridad. Usando colores, el rojo sería lo más urgente, el amarillo lo que puedes hacer más tarde y azul lo que puede esperar.

Durante el resto del día, mantén tu vista lejos de los lugares en donde la información se presenta en color. En el camino, busca color en los señalamientos de tránsito. En la escuela, echa un vistazo al salón de clases, libros de texto, etc. En un restaurante, fíjate en el diseño del menú. ¿En dónde viste el mejor uso del color? ¿Podrías tomar lo que viste y utilizarlo en tu vida diaria?

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